Maria la que no era bendita.
Te contaré la historia de MarÃa, la que no era bendita en medio de ninguna mujer.
José iba por la calle que va rumbo a la iglesia católica, unas cuadras antes habÃa un parque, en ese lugar estaba una chica muy joven, quizás unos 10 años menor que José, ella pensó que el tenÃa menos edad y por eso tomó el valor de decirle: "Adiós guapo, por que tan serio, podrÃas regalarme tu número", El pobre José en su mente dijo, será que esa chavala me esta jugando una broma?.
Al ver la insistencia de ella, José decidió cambiar su rumbo e ir donde la chica, y le dijo: Hola mucho gusto, mi nombre es José, ¿Cual es el tuyo? La chica un poco cohibida, con pena le respondió: Hola mi nombre es MarÃa.
José con mucha cautela le dijo: Hola MarÃa que bonito nombre tienes , dime ¿en que te puedo ayudar?, MarÃa no tenÃa en sus planes que José tomarÃa el valor de ir donde ella, No tenÃa ni plan A, Ni plan B, asà que le tocó improvisar.
Maria le respondió: Hola José, pues te vi por la calle y me pareciste un caballero muy elegante, alto, con buen porte y me has llamado la atención, me pareces un joven muy atractivo.
José estaba en shock, se quedó asustado de que una desconocida tomara ese valor al decirle cosas muy halagadoras, José era un tipo sencillo, no era ostentoso, con buen pensamiento. humilde y no hacÃa uso de sus cualidades fÃsicas;
pero al escuchar todo lo que dijo MarÃa, José quedó viendo fijamente a la chica, la vio de pies a cabeza y en sus pensamiento dijo: wow esta chavala está bonita, me estará jugando una broma? es demasiado bella para mi.
José en su mente con baja autoestima no concebÃa que una mujer a primera vista se enamorarÃa de él.
José en su mente con baja autoestima no concebÃa que una mujer a primera vista se enamorarÃa de él.
Jose y Maria, obviamente intercambiaron números telefónicos, él dijo: Mira MarÃa no soy de esta ciudad. soy de Managua, y en estos momentos me encuentro acá (Carazo) por motivos laborales.
MarÃa muy triste le dijo: Pues es la última vez que te volveré a ver , podrÃas regalarme un abrazo? él le dijo : claro con mucho gusto, se dieron un fuerte abrazo que se prolongó en minutos y en medios de miradas;
MarÃa acercó sus labios a los de José y se dieron un beso, fue un beso tÃmido pero habÃan unidos sus labios con apenas conocerse,
Entre susurros ella le dijo a José al oÃdo: Quiero volver a verte, veamonos pronto, José le respondió: haré todo lo posible, tienes mi numero, escribeme y veamos que pasa.
Ese mismo dÃa en la noche MarÃa le mandó un Hola por whatsapp, Y empezó una larga e interminable plática llena de flirt, risas y fotos sensuales.
El tiempo pasó y como ambos ya se conocÃan y sabÃan el sabor de sus labios, no habÃa problemas para sentir un poco de confianza, asà que planearon dÃas y horas para verse.
Ambos habÃan encontrado su punto de reunión, donde se comÃan a besos y se exploraban sus cuerpos con sus manos, parecÃa que la relación era perfecta, se gustaban y era afecto mutuo.
Pero MarÃa guardaba un secreto, No le habÃa contado a José acerca de alguien, era Carlos el Novio de Maria, un chico atento, amoroso, lleno ternura, no era celoso, no era "tóxico", básicamente Carlos era el hombre perfecto.
Carlos empieza a sospechar que MarÃa ya no le pone la atención que antes tenÃa con él, observa que MarÃa pone excusas para no verlo los fines de semana, permanece en lÃnea en whatsapp y no deja ni en visto los mensajes de él.
Todo eso llevó a que Carlos un dÃa siguiera a Maria y descubriera que ella tenÃa otro galán, Carlos con mucha ira, observó cómo su amada se daba besos y caricias que no eran de amigos con otro varón.
Carlos se fue a su Casa y buscó su arma de fuego, una Desert Eagle, Calibre .45, la cargó de municiones y se dirigió rumbo a su venganza.
Maria y José iban camino a un motel, El calmante se llamaba el lugar donde iban a revolcarse y quitarse las ganas carnales que tenÃan uno del otro, José obviamente desconocÃa que Maria tenia un "amor" con otro hombre.
Carlos los siguió sin que ellos se dieran cuenta y esperó que ambos entraran a la habitación número 512, José y MarÃa estaban consumiéndose en lujuria y pasión, mas no sabÃan que les vendrÃa una sorpresa.
Carlos tomó valor y preparó su arma, entró a la habitación y sin mediar palabras le disparó 8 tiros en el pecho a José, las sábanas de color blanco de aquella cama. quedaron manchadas de sangre, José se desplomó fulminado por los tiros que acababan con su existencia.
Carlos quedó viendo a Maria fijo a los ojos y la apuntó con su arma, Ella solo cerró los ojos esperando su fin, y sólo escuchó como de la Desert Eagle salió el proyectil que iba a acabar con la vida de Carlos.
Carlos se suicidó, de un certero disparo en la sien, su vida ya habÃa acabado desde el momento que descubrió que MarÃa era desleal, José y Carlos muertos, ambos inocentes sin saber que amaban a una mala mujer.
Llegó la policÃa levantó los cuerpos y en el dictamen dijeron que fue un crimen pasional,
José y Carlos fueron engañados por una arpÃa que solo querÃa satisfacer sus mas bajos instintos.
José y Carlos fueron engañados por una arpÃa que solo querÃa satisfacer sus mas bajos instintos.
MarÃa quedó libre de cargos y no pasaron más de 3 meses cuando se supo que ella ya tenÃa otro galán y lo mas seguro es que la historia se volverá a repetir, por que a como decÃa la abuelita: perra que come huevo, ni que le quemen el pico lo dejará de hacer.
FIN
Espero que les haya gustado.
En esta historia trato de narrar algo muy real que sucede, frecuentemente, dicen que hay algo muy seguro en esta vida y son: La muerte y la traición.
Escrita By: Ze
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